El viernes 11 de noviembre tuvo lugar, en la Universidad de Deusto, la conferencia del Grupo G30 impartida por Leonardo Becchetti, bajo el título Beyond the homo economicus: ethical finance and the civil economy.
Aquí podéis ver la convocatoria.
Leonardo Becchetti es Profesor de economía política de la Universidad de Roma, Master of Science, in Economics por la London School of Economics y Doctorado por la Universidad de Oxford y de Roma La Sapienza. Ha publicado más de 300 trabajos en revistas italianas e internacionales, diversos volúmenes y contribuciones en cuadernos de investigación. Es Miembro del Consejo de Presidencia de la Sociedad Italiana de Economistas y del Comité Ejecutivo de Economética
(consorcio universitario para estudiar la responsabilidad social de la empresa), de AICCON, presidente del Comité Etico de Banca Etica desde 2005, de CVX-Italia y de LMS. Dirige un portal Web sobre Bien Común y participa en el blog La Repubblica.it.
Se distribuyeron dos artículos de la Revista de Fomento Social, enero-junio 2014, nº 273 y 274
en cuyo apartado 8 figura el artículo de Leonardo Becchetti y Massimo Cermelli, titulado Reduccionismos económicos y voto con la cartera y volumen 70 – marzo-abril 2015, nº 279 y 280 en cuyo apartado 5 figura el artículo, de los mismos autores, titulado Papa Francisco y la economía civil- una vía para el bien común en la economía global.
El Ponente nos hizo esta presentación.
Esta es la síntesis de su conferencia, que fue impartida en inglés.
An always larger and more consolidated body of empirical evidence documents that individuals donate money and time and their sense and satisfaction of life is strengthened by good relationships with other human beings. This evidence should lead us to go beyond a misled opposition between a ?satisfactory? pure egoism – which is still a standard benchmark in most economic models and a suffered
pure altruism.
What seems to emerge from this new body of evidence is an integrated paradigm of enlightened and longsighted self-interest by which individuals may discover their intrinsically relational nature and learn that their sense and satisfaction of life builds upon the capacity of doing things that are valuable for those others whose benevolent outlook represents a fundamental part of their own identity. Concerned
investors, in finances, express their social responsibility by channeling funds to microfinance institutions via microfinance investment.
The new paradigm has important consequences in terms of policies. Approaches based on the reductionist paradigm which just aim at solving conflicts of interest by limiting the possibilities of opportunistic behaviour should be integrated by actions aimed at reinforcing the law of motion of moral and civic values and, through them, the natural antibodies of the society which may help it to achieve socially desirable goals.